Sinopharm es el nombre de las vacunas producidas en China que acaban de llegar al aeropuerto Simón Bolívar de Caracas, Venezuela, junto con un aumento de los suministros para el plan de bioseguridad, como las pruebas de covid-19, las mascarillas y otros equipos necesarios.
La situación sanitaria en Venezuela
No es la primera vez que Venezuela recibe vacunas de otra nación. En febrero, el país sudamericano recibió unas 100.000 vacunas rusas, llamadas Sputnik V.
Según la Universidad Johns Hopkins, en Venezuela se han registrado hasta ahora casi 150.000 casos de coronavirus y unas 1.500 muertes por covid-19.
Venezuela se encuentra en una situación financiera increíble y cada vez peor. La crisis económica que arrastra la nación desde que Hugo Chávez asumió la presidencia ha golpeado al país por todos lados, lo que ha provocado una crisis humanitaria.
Los hospitales no están preparados para una pandemia y los trabajadores de la sanidad pública están haciendo un tremendo trabajo para estar a la altura.
Vacunas utilizadas para la campaña de vacunación en Venezuela
El gobierno venezolano también está incluido en el programa especial de inmunización de la Organización Mundial de la Salud (OMS) llamado COVAX.
Un programa para proporcionar vacunas a los países más pobres o con menos recursos del mundo.
Sinopharm es una empresa propiedad del gobierno chino y Venezuela no es el único país al que ha llegado la vacuna de la compañía, ya que también fue llevada recientemente a la República Argentina, donde dos aviones del país fueron cargados con al menos 96 minivacunas del gigante asiático.
En otros continentes, la vacuna ha recibido luz verde en países como Hungría, donde el primer ministro Viktor Orban y el presidente Janos Ader recibieron la vacuna.